Come True, 3,7/5. Sitges 2020
Película del canadiense Anthony Scott Burns.
Esta película es como sumergirse en un sueño, por las escenas y los colores que se ven en ella. Ayuda la continuidad del principal personaje, interpretado muy adecuadamente por Julia Sarah Stone, que está presente en casi todas las escenas y nos hace a alarmas a la película durante por el tiempo que dura.
Una película que habla de la posibilidad de grabar los sueños de la gente, en este caso de las pesadillas y el elemento común que hay en ellas en todas las personas según el director.
El director en esta película es también el guionista, ha hecho el escenario (a lo Stanley Kubrick según nos confesó su productor en un vídeo, ya que el propio director es muy timido para mandar el vídeo), también colabora con la música.
Sarah es una chica de 18 años que tiene pesadillas y ha abandonado su casa, se refugia en un experimento universitario sobre el sueño, en principio eso es una buena idea porque también puede ganar dinero a la vez que dormir. La experiencia se convierte en el causante de un descubrimiento increíble y espeluznante.
La película tiene un guión bastante aleatorio, pasando la sueño a realidad y de realidad a sueño, sin saber muy bien donde nos encontramos. Esta bien grabado, con golpes de realidad y cuidado con parecerlo como la marca del parche en el ojo que contribuya después de varias secuencias.
El final de la película puede aclarar toda ella, o puede crear más dudas respecto a el sentido de esta película.
Comentarios
Publicar un comentario