Wheel of fortune and fantasy. Berlinale 2021

 Oso de Plata Gran Premio del Jurado Berlinale 2021. Cinta japonesa presentada en competición oficial de la Berlinale, con dirección y guión de  Ryusuke Hamaguchi, quien ya participó en otro gran festival como el de Cannes 2018 con "Asako I y II".

En Berlín nos presenta esta obra dividida en 3 capítulos independientes:

- Episodio 1: Magia (o algo menos seguro)

- Episodio 2: Puerta abierta de par en par

- Episodio 3: Una vez más

Cada uno de los episodios describe las relaciones de amor entre diferentes personajes. A modo de "Relatos salvajes" donde cada historia no está relacionada, pero a la japonesa, apreciando extensamente el modo de vida japonés y en particular la ciudad de Tokio. 

En el primer capítulo nos cuenta la historia, más bien melodrama de teleserie venezolana a la japonesa, donde las dos jóvenes protagonistas femeninas hablan de un hombre millonario. Este hombre parece querer empezar una relación con una de las chicas, quien no sabe que su amiga es su exnovia. Las escenas de celos se suceden entre la ex novia y el hombre. El tratamiento de esta etapa es excesivamente filosófica, con un guión plagado de expresiones profundas para definir los sentimientos de ambos. En ocasiones, y no solo en este capítulo, parece como si estuviéramos viendo la película "Malmkrog", donde los diálogos son exacerbadamente extensos y profundos, obligando a estar constantemente pendiente de los protagonistas para no perder el hilo. 

El segundo capítulo habla de la relación de una pareja de estudiantes y la relación de la chica con un profesor que acaba de ganar un premio muy prestigioso. La relación de admiración y de excitación a través de la voz es el tema principal, llegando a crear momentos extraños para el espectador no acostumbrado a que las emociones se desarrollen de una forma tan pausada como es la que nos muestra la película.

En el tercer capítulo se narra la historia de dos antiguas alumnas que se cruzan por casualidad en un puente de Tokio. Mezclando los problemas de memoria con los de admiración y un posible idilio amoroso entre ambas mujeres, el director nos cuenta, como nos tenía acostumbrados en los otros dos capítulos, la relación entre ambas mujeres. Este último capítulo nos muestra el amor platónico, juvenil, donde no se sabe dónde empieza la admiración y dónde el amor. Mientras que en los anteriores relatos estaban claros los límites del amor: platónico obsesivo de la joven por el millonario en el primero, y admiración por el profesor en el segundo.

Una de las características es la grabación con cámara estática, muy pocas veces hay movimiento de cámara, dejando la pantalla en el lugar de un escenario de teatro, a lo Michel Franco en "Después de Lucía". Esto da una sensación de estabilidad y simetría a la cinta que le impregna elegancia, haciendo que el público se habitúe a ver a dos protagonistas en las mismas posiciones dialogando durante planos que pueden llegar a 10 minutos. En cierto modo es la mimetización de la realidad, donde las conversaciones son así, estáticas y largas. Por otro lado, esta falta de movimiento intencionado, hace que la cinta no sea todo lo dinámica que debería, haciendo que el espectador considere que es un poco lenta. Las 2 horas del largometraje no ayudan a esto. Por otro lado, están de moda las películas donde lo más importante son los diálogos incisivos, de sentimientos, de ping pong en donde unos se contestan a otros cuál debate de filosofía. Al respecto tenemos películas parecidas a la de Hamaguchi premiadas y nominadas, como son el caso de "Les choses qu´on dit, les choses qu´on fait" o "La virgen de Agosto". En definitiva, una cinta tranquila, que habla de las relaciones personales con diálogos íntimos, El espectador puede llegar a entender los sentimientos por los que pasan los protagonistas a través de sus palabras.

Opinión: 2,5/5