La Fam (La Mif). Seminci 2021

Siguiendo la norma no escrita de que el premio del jurado debe de ir para la película más tediosa pero sorprendente del festival, "La Fam" deja claro su grandes probabilidades como una de las ganadoras absolutas. 

Con un centro de acogida de menores, donde hay adolescentes y trabajadores sociales, el título es ya una declaración de intenciones, o al menos su posible interpretación, viene del francés "La Mif", que parece venir del idioma inventado verlan y que quiere decir "La chica", "La mif" suena como "la femme" pero al revés, y con alguna variación proveniente de suiza, de donde es el director Fred Baillif. Con este título nos esperamos una cinta sobre mujeres de un cierto estrato social donde hablar en verlan es lo habitual, cuya situación económica y cultural no es muy elevada. Esta es la lectura que parece querer indicar el director con el título.

Historias de integración

Las casi dos horas de la cinta están divididas por capítulos cuyos títulos son los nombres de las protagonistas. Cada historia es tan similar que al cabo de 20 minutos uno llega a preguntarse sobre la necesidad de tener que aguantar en la sala viendo lo triste de la vida del resto de protagonistas, que más o menos se parecen a la vida de la primera chica de la que cuentan sus desventuras. El director es consciente de este parecido casi calcado entre las historias, intentando crear una rara tensión cortando escenas y jugando con la linealidad temporal.

Sébastien Lifshitz siempre presente

Baillif sigue la corriente de filmación del único y genuino Sébastien Lifshitz, donde la cámara en mano es una  obligación, las actuaciones donde la realidad, el documental, la ficción es complicado de diferenciar cual "dogma 95" reciclado. Este tipo de film no es nuevo, pero al ser pocas las películas de este estilo que participan en los festivales, a los jurados les florecen pasiones incontroladas por ellas obsequiándoles con premios por la originalidad, que en realidad no es tal. Otro de los ejemplos lo tenemos con la última película de Jonás Trueba, cuyo estilo de filmación y guion en "Quién lo impide" es una copia casi idéntica de "Adolescentes" de Sébastien Lifshitz. El director francés grabó a dos amigas adolescentes durante varios años, viendo la diferencia entre las clases sociales de ambas. Jonás graba a varios adolescentes durante varios años, también con lucha de clases, y apareciendo él mismo en la cinta, material que tenía y que probablemente optó por incorporar a su película para mostrar algo mínimamente diferente y que no le tacharan de haber copiado la cinta "Adolescentes".

En el caso de Sébastien y Jonás los resultados en festivales han sido óptimos, por lo que siguiendo la misma regla de tres, es altamente probable que "La Fam" se lleve uno de los grandes premios del festival de cine de Valladolid SEMINCI. 

Un guion sin mensaje a transmitir

La cinta toca muchos temas, entre ellos inadaptación social, abuso de poder, humillación por parte de las chicas del centro, violación de un menor por parte de una de las chicas, pedagogía para meter a las chicas en el buen camino, relación "tóxica" entre una madre y su hija. Cada chica muestra la complicación de su vida las cuales se entremezclan con las de las demás en cierto punto de la película, por lo que llegamos a ver con pesadez la misma escena hasta 3 veces. Sin ser un guion con una intención fija, y con un único punto final bastante cuestionable por la verosimilitud, que es el de la directora del centro. El resto de protagonistas parecen ser "anécdotas" que pasan por el film, sin finalizar, sin cuajar, sin querer transmitir un mensaje claro dejando el film huérfano de sentido.

Opinión: 2/5